Pérdida de masa muscular - Instituto Hormonal

La pérdida de masa muscular, también conocida como atrofia muscular, es un proceso natural que ocurre cuando los músculos se vuelven más débiles o más pequeños. Existen varios factores que pueden causar la pérdida de masa muscular, como la edad avanzada, lesiones, enfermedades, inactividad física y dieta deficiente. Algunas causas comunes de la pérdida de masa muscular incluyen:

• Envejecimiento: A medida que envejecemos, perdemos gradualmente masa muscular y fuerza debido a cambios hormonales y pérdida de fibras musculares. Esta pérdida acelerada de músculo relacionada con la edad se llama sarcopenia.
• Inactividad: Si no usamos regularmente nuestros músculos, estos comienzan a atrofiarse y perder fuerza. Estar postrado en cama por una enfermedad o lesión puede causar una rápida pérdida de masa muscular.
• Enfermedades: Condiciones como cáncer, insuficiencia cardíaca congestiva, fibrosis quística, diabetes y problemas renales pueden causar la pérdida de masa muscular.
• Lesiones: Si nos rompemos un hueso o sufrimos una lesión que limita el movimiento de un área del cuerpo, los músculos correspondientes probablemente se atrofien.
• Malnutrición: No consumir suficientes calorías, proteínas u otros nutrientes importantes para el mantenimiento muscular puede contribuir a la pérdida de masa muscular con el tiempo.

La pérdida de masa muscular puede tener impactos significativos en nuestra salud y calidad de vida. Las personas con bajos niveles de masa corporal magra suelen tener menos fuerza, resistencia y movilidad. También corren un mayor riesgo de sufrir caídas e fracturas óseas. En algunos casos, la pérdida de músculo puede ser un signo de una condición subyacente grave que requiere atención médica. Afortunadamente, hay algunas estrategias que pueden ayudar a prevenir y manejar la pérdida de masa muscular. Hacer ejercicio de fuerza, obtener suficientes proteínas en la dieta y recibir tratamiento para cualquier enfermedad subyacente son claves. También puede ser útil trabajar con un fisioterapeuta o entrenador personal para crear un programa de ejercicios personalizado. Cuanto antes se implementen estas estrategias, más efectivas serán para mantener una masa muscular saludable.